A ver, ¿qué le pasa?

Hay personas, películas, discos, situaciones o sentimientos que nos marcan de por vida. A veces lo percibimos instantáneamente. Otras, recién lo asimilamos cuando pasa un tiempo. El saber si nos marcó positiva o negativamente es algo que se mezcla con mucha facilidad, llegando al punto de no importar. La vida te va enseñando que lo que hoy es lo más triste del mundo, mañana será una nimiedad. Tal vez no mañana. Y tal vez no una nimiedad. Pero será "superado" por otro sentimiento de tristeza infinitamente profunda.
La felicidad obra de la misma manera. El tiempo las unifica a ambas y las pone bajo un mismo paraguas: cosas que te pasaron. Así. Sin más. Y esas cosas que te van pasando, te van marcando.
Qué tan profundas son esas marcas no es algo que manejamos nosotros. Así me tatúe en la mano el nombre de una película que me gustó, el tiempo me demostrará que la olvidaré y que ese tatuaje pasará tan inadvertido como la marca de la varicela que me quedó de la infancia. Y mirá que me preocupé cuando noté que me acompañaría toda la vida. Pero el tiempo pasó y yo la olvidé. Ahí está la marca, como eventualmente podría estar la película.
Cada tanto me topo con ella o la recuerdo y mi mente se dispara hacia lugares increíbles. Y yo lo disfruto. Son lindos esos viajes involuntarios y sedentarios, que partieron de una cosa tan negativa/positiva como una marca de la varicela.
Las marcas están y nos acompañarán de por vida. Las cosas que nos van pasando nos acompañarán de por vida. Y eso está buenísimo. Nada es tan grave, nada es tan bueno. O sea... Lo mejor o lo peor que nos esté pasando, mañana será superado por otra cosa. Ojalá no fuera así. O por suerte es así.
Hoy me sorprendí con una muy extraña sensación. Terminé de leer un libro y se me despertaron naturalmente unas ganas locas de sentarme frente a la máquina y vomitar todo esto. Un libro que había empezado a leer y devorar hace varias semanas, pero que por determinadas razones que desconozco, me aburrí y abandoné.
Hoy lo retomé, hace unas horas, y lo terminé de un tirón. El entusiasmo estaba intacto. Hasta renovado quizás. El libro me aceptó, inanimado él, sin reproches o cosas por el estilo. El tiempo que había pasado entre que permaneció cerrado y que lo volví a abrir no pareció ser tan largo. Igualmente, fueron un par de semanas nada más. Y lo mismo con las horas que me llevó terminarlo.
El tiempo no fue tan tiempo. El tiempo no manejaba las cosas que me estaban pasando. Eso no es algo muy habitual, al menos en mi vida. Entonces aproveché y acá estoy, escribiendo sobre las cosas que te marcan. En este caso, habiéndolo notado en el mismo momento que me estaba pasando. Este libro me marcó y no puedo racionalizar el porqué. Tampoco sé si me marcó positiva o negativamente. Menos que menos, tengo noción de cuando recordaré qué me marcó tanto hoy, ahora. Pero la gran puta que me marcó. Que me está marcando, mejor dicho.


Gracias Casciari. Gracias también al Mati, a María y a Ramiro, las tres personas con las que alguna vez hablé sobre el creador de Orsai, con diferencia de años si mal no recuerdo. Mañana tal vez olvide esto, pero hoy recordé con lujo de detalles esas charlas. Mati en la agencia, recomendándome a un tipo que debía leer y que me iba a gustar porque escribía como yo. Jeje. Ahora, visto a la distancia, debe ser de lo elogios más grandes que me han dicho. María en un bondi en Buenos Aires, un año después, ya conversando los dos sobre cuánto nos gustaba. Y casi que otro año más tarde, Ramiro en su casa, contándome de un tipo que había descubierto y que lo había fascinado. Y yo hablándole de mis estúpidas trabas y negaciones. Jeje. Qué irónico todo.
Tal vez estoy escribiendo esto para que le llegue a alguien esta gragea en forma de recomendación. Pero me suena que no. Creo que lo estoy escribiendo con un objetivo bastante más egoísta. Tiene toda la pinta de que estoy tomando a grageas como una cápsula del tiempo con la que me encontraré dentro de 2 meses, 3 años o 20. Me parece que me estoy rascando adrede para dejarme una nueva marca de la varicela.

28 comentarios :

Cintya Posse dijo...

Capaz que si es egoista, pero la verdad me gustó mucho.

No puedo acotar mucho más, me gustó, mucho.

· · · l u i g i · · · dijo...

qué bueno!!! a mí la verdad que también!!! me sentí re bien ayer de madrugada escribiendo esto, y me siento re bien ahora. estoy orgulloso de esta gragea. tiene un no sé qué que me encanta. y bueno... nada... genial que se haya transmitido algo y te haya gustado. beso!!!

Principessa_Uy dijo...

1-Excelente gragea.
2-Seguí rascándote adrede en estos casos y dejando que el resto te apreciemos este tipo de marcas.
3-Quiero leer ese libro.
4-Sos mi blogero favorito (entre otras cosas en las que me declaro tu fan).
5-Perdón por haberte contagiado la varicela.
6-En un pasaje me hiciste reflexionar que es muy gracioso que hayas comenzado haciendo este sitio para otra y terminas escribiendo para vos, cual capsula del monolito.
7-Tenia que poner un 7, odio los número pares.

Sebas dijo...

Vaya un Me gusta para esta gragea!

Cintya Posse dijo...

En literatura, allá por 3º de liceo, tenía una profesora muy grosa. La mina nos dijo que un libro nos gusta cuando el primer párrafo nos atrapa. Si no nos atrapa en ese párrafo, es muy difícil que nos atrape más adelante.

Hay personas, películas, discos, situaciones o sentimientos que nos marcan de por vida.

No puedo agregar nada más. Esa frase ya me encantó y todo lo que vino después también. Excelente ☺










[Número impares jiji]

· · · l u i g i · · · dijo...

principessa: GRACIAS!!!!!! no sé si alcanza esa palabra, pero es la más adecuada que encontré en el idioma español para expresar lo que me pasó al leer tu comentario...

sebas: arriba!!! vaya un "gracias" también para ese "me gusta"!!!

cinty: puff... no será mucho? jeje. gracias!!!!!

Dobleveo dijo...

Una gran gragea, sindudamente.

A mí me pasó que primero, de rebote conocí la Orsai, luego me deboré la obra de Casciari.

Para los que no conocen Orsai:

bit.ly/w11rtt

Luego van a querer conocer la obra del creador.

Dobleveo dijo...

Y si hay que votar por libros que me marcaron voto por "El lector" de Bernhard Schlink, la leí en un momento tan áspero que ta, no sé, es una historia más, pero el momento en que me llegó estuvo salado.

· · · l u i g i · · · dijo...

dobleveo: bien vos por poner el link!! y lo que decís del momento es tal cual. por eso no lo quise recomendar de una al libro de casciari. capaz que cualquiera lo lee y nada que ver. o sea... yo seguramente lea "el lector" y capaz pase inadvertido. o tal vez no. eso es lo lindo. arriba!!!

Anónimo dijo...

Pregunta a Dobleveouu...


El Lector es el libro de la película donde trabaja la de Titanic??

Cintya Posse dijo...

La anónima fui yoooooooooooooooooooooooooooo

Dobleveo dijo...

Es Kate Winslet la de la película, si te digo que no vi Titanic me crees?

Igual, como en casi todos los casos, la película dice una ínfima parte de lo que transmite el libro, creeme.

Agustin dijo...

Me gusto tanto la reflexion que acabo de comprarmelo en Amazon por 7 dolares para la version kindle.

Abrazo

· · · l u i g i · · · dijo...

en serio?!? qué bueno!!! ojalá te pase algo parecido!!! o superior!!! después contá!!! abrazo!!!

Agustin dijo...

Lo voy a leer y despues te grageo!!!
Abrazo

Alexis dijo...

No sé, a mí me marcó leer Condorito, pero bue, cada uno se marca con lo que puede.

Cintya Posse dijo...

Dobleveo:

Eso pasa siempre cuando se basan en un libro. Es muy buena igual, así que el libro debe ser mil veces mejor!

Y si no viste Titanic no tuviste infncia!!! A mi me mandaron a mi cuarto cuando se empezaron a empañar los vidrios del auto y después me volvieron a llamar para que siguiera mirando...

· · · l u i g i · · · dijo...

alexis: a mí también me marcó! salado! pero en ese momento no existía grageas... plop!

cinty: me encantó lo de "a mí me mandaron a mi cuarto cuando se empezaron a empañar los vidrios del auto y después me volvieron a llamar para que siguiera mirando...". jajajaja. genial!!!

· · · l u i g i · · · dijo...

up!!!

Cintya Posse dijo...

Hablando de cosas que nos marcaron, no?

Todavía no sé porqué me mandaron a mi cuarto, qué estaban haciendo?? Para mi estaban empañandolo con aire caliente para que Kate pueda marcar su mano, como vi que hizo...

· · · l u i g i · · · dijo...

la idea es que hiciera una carita sonriente, pero justo se cayó... fue sólo eso.

Cintya Posse dijo...

Pah, gracias, no sé qué haría sin vos

Ale dijo...

Que texto tan lindo!
Me dio ganas de agarrar la Orsai que paseo en la mochila desde hace un mes y que, inexplicablemente, no puedo terminar de leer... :)

· · · l u i g i · · · dijo...

qué bueno que te haya gustado el texto!! gracias por decirlo!! y capaz que es el efecto que tiene casciari: uno lo abandona para nunca enfrentarse al hecho de que se termine.

Mr. LoMein dijo...

Ale, pasear la Orsai en la mochila desde hace un mes habla de tu amor por la misma. Ta grande para andarla paseando. O tenes una de las nuevas? je! Yo tengo la numero 1 y es un pedazo de libro!.

Cinty lo que decís de el primer párrafo es tal cual. Y me paso lo mismo con esta gragea.

Sr. Grageas ya se lo dije pero esta gragea esta en el Top 5 y peleando el primer puesto. Rascate como loco, esta es una muy buena marca, llena de cosas positivas. Salú

· · · l u i g i · · · dijo...

qué gusto que te hayas dado una vuelta de nuevo por acá!!! qué bueno!!! muchas gracias, y no sólo por estas palabras puntuales!!!

a* dijo...

Quiero leerlo, también hace tiempo que este tipo se cuela en mi cotidianidad, como casualmente, pero yo ya entendi que de casual no tiene nada. Tengo que leerlo.

a*

· · · l u i g i · · · dijo...

nada es casual en la vida. a leerlo ya! jaja.