Viviendo al límite

Estaba lavando la cocina y tuve la sensación de que se me iba a romper algo. Los indicios fueron de por sí bastante claros: se me resbalaron dos vasos. Mis reflejos me asombraron y el vaticinio no se concretó. Me sequé las manos, me vine a fumar un pucho y a gragear la situación. Si en los días siguientes no escribo más es porque definitivamente rompí algo, me lastimé y me tuvieron que internar de apuro. O también se podrá deber a que no me ocurrió nada tan apasionante como esto.

2 comentarios :

Detaquito dijo...

Si algun dia tenes la sensacion de que vy a morir, por favor no me avises.-

· · · l u i g i · · · dijo...

ok. no vale arrepentirse después y quejarse de que no te avisé...