Divertite sola entonces

¿Cuál sería el penúltimo lugar en el que me podría encontrar con ella? Digo el penúltimo porque a esta altura y por cómo vienen las cosas, el último vendría siendo un motel. El penúltimo era una ferretería. ¡Una ferretería! Y ahí me la encontré.
Yo fui a comprar un cuerito para arreglar una canilla que perdía. Mientras el señor que me atendió fue a buscarla a un cajón, yo me dediqué a mirar a la otra gente que estaba en el local. Y ahí estaba ella. Increíblemente. O sea… Ya me costaba creer que yo estuviera en una ferretería, pero mucho más aún que ella también. ¡En la misma y en el mismo momento!
Esas cosas del destino hay que aprovecharlas. Fue entonces que decidí hacerme pasar por alguien de la ferretería y acercármele para preguntarle si necesitaba algo. El diálogo fue más o menos éste:

-Hola, ¿qué tal? ¿te puedo ayudar en algo?
-Hola, ¿sos de acá?
-Sí, claro.
-Ah, qué raro, porque no tenés la remera que tienen ellos.
-Jeje. Lo que pasa es que ellos son empleados míos. Yo soy el dueño. Todo lo que ves es mío.
-Mirá. Bueno… Me podés ayudar sí…
-Decime… Veo que estás buscando lámparas…
-Sí. Pero tengo la duda de qué tipo de enchufe tengo cerca de la mesita de luz, así que no sé si va a servirme.
-Si querés yo voy y te la enchufo.
Ella notó que lo que le había dicho ocultaba ciertas intenciones un tanto depravadas, pero como yo supuestamente era el dueño de la ferretería, no sospechó. La cagada fue que el tipo que me había atendido apareció justo en ese mismo momento, anunciándome que no le quedaban cueritos y dejando en evidencia que yo era un simple cliente. Igualmente, sin asumir aún la derrota, me dirijo a ella preguntándole:
-Entonces… ¿querés que vaya a tu casa y te la enchufe?
No sé si la lámpara iluminaría bien, pero doy fe de que servía como elemento de defensa personal.

2 comentarios :

Alexis dijo...

Una cosa: ¿se trata de distintas ellas en cada gragea?
Porque sino a ella no le debe subir bien el agua al tanque. No puede caer en todas.

Y sí, estoy del lado de ella ahora.

· · · l u i g i · · · dijo...

pollerudo!