Ella estaba hablando por teléfono. Como suele pasar, nunca notó mi presencia. En un momento, le dijo "mi amor..." a su interlocutor. Yo, ni lerdo ni perezoso, le pregunté "¿qué pasó, cosita?". Ahí me descubrió, obviamente. Pero en vez de regalarme una sonrisita por lo menos, me miró y pareció escribir "andá a cagar" con su mirada. ¡¡Pero andá a cagar vos, puta!! ¿Quién carajo te pensás que sos? Andá a habar con ése que ni siquiera te escucha y que te garcha pensando en otra...
3 comentarios :
jaja me haces cagar de risa XD
Salao... no era tu pareja verdad?...
juan: bueno... muchas gracias!! me hacés llorar de la emoción, mirá. un gusto tenerte por acá.
anónimo: no hablo de mi vida personal. y muchísimo menos con anónimos. jaja.
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