Ahora estoy medio en pedo, pero igual encaré. Recordé que hoy mandé ropa a lavar a Burbujitas* y que entre las cosas que llevé, se encontraban las sábanas que estaban en la cama. O sea: me di cuenta que iba a seguir tomando y moriría del pedo, pero me detuve en el detalle de que dormiría sobre el colchón. Así que recontra encaré y fui y le puse sábanas a la cama. Y cuando estaba por ponerle las fundas a la almohada, me pregunto “¿y si corto las almohadas?”. Mi respuesta a mi pregunta fue positiva, y para peor, muy entusiasta. Es un tanto patético el cuento, así que resumo en que ahora estoy haciendo una pausa para volver a agarrar la tijera e intentar terminara de cortar la primer puta almohada de polifón. ¡¡Odio el polifón!! ¡¡Y para peor, no sé ni cómo se escribe!!
* ¡¡Sí!! ¡¡El lavadero de la ropa sucia con olor a limpio!!
No hay comentarios. :
Publicar un comentario